
Los muslos de pollo horneados con miel y soja son rápidos de cocinar con sólo unos pocos ingredientes, listos en menos de 30 minutos. Con una deliciosa salsa de soja con miel, es la receta de pollo perfecta para una cena de fin de semana.
En un tazón poco profundo, combine la miel, la salsa de soja, las cebollas de verdeo, el aceite de cocina, el ajo, el vinagre, el aceite de sésamo y el jengibre. Mezclar bien y reservar.
Secar el pollo con una toalla de papel. Recorte el exceso de grasa. Sazone con sal y pimienta y luego transfiera el pollo al tazón con el adobo. Cubra y deje marinar el pollo durante al menos 30 minutos si el tiempo lo permite (o durante la noche).
Precaliente el horno a 425°F (220°C). Transfiera el pollo junto con el adobo a una sartén de hierro fundido o a un plato para hornear. Hornee durante 25 minutos, volteando dos veces mientras se hornea para asegurar que el pollo no se seque encima.
Ase durante 5 minutos a fuego alto hasta que se dore y se carbonice ligeramente en los bordes. El pollo debe tener una temperatura interna de 165°F (o 70°C).
Adorne con perejil y semillas de sésamo opcionales. Sirva los muslos de pollo con los jugos de la sartén sobre arroz al vapor, arroz con coliflor, fideos de calabacín, fideos normales o puré de patatas.
Ingredientes
Instrucciones
En un tazón poco profundo, combine la miel, la salsa de soja, las cebollas de verdeo, el aceite de cocina, el ajo, el vinagre, el aceite de sésamo y el jengibre. Mezclar bien y reservar.
Secar el pollo con una toalla de papel. Recorte el exceso de grasa. Sazone con sal y pimienta y luego transfiera el pollo al tazón con el adobo. Cubra y deje marinar el pollo durante al menos 30 minutos si el tiempo lo permite (o durante la noche).
Precaliente el horno a 425°F (220°C). Transfiera el pollo junto con el adobo a una sartén de hierro fundido o a un plato para hornear. Hornee durante 25 minutos, volteando dos veces mientras se hornea para asegurar que el pollo no se seque encima.
Ase durante 5 minutos a fuego alto hasta que se dore y se carbonice ligeramente en los bordes. El pollo debe tener una temperatura interna de 165°F (o 70°C).
Adorne con perejil y semillas de sésamo opcionales. Sirva los muslos de pollo con los jugos de la sartén sobre arroz al vapor, arroz con coliflor, fideos de calabacín, fideos normales o puré de patatas.