La cebolla, el ajo y el vino blanco se unen para darle un toque de exquisitez a este plato de conejo con tomate frito. Preparado con amor y cuidado, este plato es perfecto para satisfacer tus papilas gustativas y sorprender a tus seres queridos en cualquier ocasión. Aprende cómo hacerlo con nuestra receta detallada y disfruta de la auténtica cocina casera.
En una sartén grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio-alto. Agrega el conejo y dóralo uniformemente por todos lados. Luego, retira el conejo de la sartén y resérvalo. En la misma sartén, agrega la cebolla y el ajo. Saltea hasta que estén dorados y fragantes. Si lo deseas, vierte el vino blanco en la sartén y deja cocinar por unos minutos para que se evapore el alcohol.
Regresa el conejo dorado a la sartén y agrega las hojas de laurel. Vierte el tomate frito sobre el conejo y las verduras. Añade sal y pimienta al gusto. Reduce el fuego a bajo, tapa la sartén y cocina durante aproximadamente 1 hora o hasta que el conejo esté tierno y la salsa haya espesado.
Revuelve ocasionalmente y, si es necesario, agrega un poco de agua caliente para mantener la salsa a la consistencia deseada. Una vez que el conejo esté cocido, retira las hojas de laurel y ajusta la sazón con sal y pimienta si es necesario. Sirve el conejo con tomate frito caliente, espolvoreado con perejil fresco picado si lo deseas.
Ingredientes
Instrucciones
En una sartén grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio-alto. Agrega el conejo y dóralo uniformemente por todos lados. Luego, retira el conejo de la sartén y resérvalo. En la misma sartén, agrega la cebolla y el ajo. Saltea hasta que estén dorados y fragantes. Si lo deseas, vierte el vino blanco en la sartén y deja cocinar por unos minutos para que se evapore el alcohol.
Regresa el conejo dorado a la sartén y agrega las hojas de laurel. Vierte el tomate frito sobre el conejo y las verduras. Añade sal y pimienta al gusto. Reduce el fuego a bajo, tapa la sartén y cocina durante aproximadamente 1 hora o hasta que el conejo esté tierno y la salsa haya espesado.
Revuelve ocasionalmente y, si es necesario, agrega un poco de agua caliente para mantener la salsa a la consistencia deseada. Una vez que el conejo esté cocido, retira las hojas de laurel y ajusta la sazón con sal y pimienta si es necesario. Sirve el conejo con tomate frito caliente, espolvoreado con perejil fresco picado si lo deseas.