Esta fácil receta de costillas a la miel incluye instrucciones tanto para el horno como para la parrilla. Disfrute de un favorito de la barbacoa en cualquier momento del año. Pegajosas, dulces y sabrosas, caramelizadas y ahumadas en cada bocado. Saluda a tu nueva receta de costillas.
Quitar la membrana o la piel de plata de la parte inferior de las costillas. Dale la vuelta al costillar para que veas el lado inferior (el lado sin carne). Ve a un extremo del costillar, deslízalo con un cuchillo por debajo de la piel plateada y tira. Debería despegarse de un tirón. Reserve.
Pre-caliente el horno a 375 grados F. Mezcle todos los ingredientes del glaseado en un bol grande. Coloque las costillas en un asador grande con rejilla y luego aplique el glaseado a las costillas de cerdo por ambos lados. Si sobra glaseado, viértalo sobre las costillas.
Añade 1/2 pulgada de agua en el fondo de la asadera y transfiere la asadera al horno. Hornear durante aproximadamente 1 hora y media. Cada 20 minutos aproximadamente, rocíe las costillas con el jugo de la sartén. Si las costillas empiezan a dorarse demasiado, cúbralas con papel de aluminio y termine de cocinarlas.
Dejar reposar las costillas a la miel de 5 a 10 minutos antes de servirlas.
Ingredientes
Instrucciones
Quitar la membrana o la piel de plata de la parte inferior de las costillas. Dale la vuelta al costillar para que veas el lado inferior (el lado sin carne). Ve a un extremo del costillar, deslízalo con un cuchillo por debajo de la piel plateada y tira. Debería despegarse de un tirón. Reserve.
Pre-caliente el horno a 375 grados F. Mezcle todos los ingredientes del glaseado en un bol grande. Coloque las costillas en un asador grande con rejilla y luego aplique el glaseado a las costillas de cerdo por ambos lados. Si sobra glaseado, viértalo sobre las costillas.
Añade 1/2 pulgada de agua en el fondo de la asadera y transfiere la asadera al horno. Hornear durante aproximadamente 1 hora y media. Cada 20 minutos aproximadamente, rocíe las costillas con el jugo de la sartén. Si las costillas empiezan a dorarse demasiado, cúbralas con papel de aluminio y termine de cocinarlas.
Dejar reposar las costillas a la miel de 5 a 10 minutos antes de servirlas.